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PAPEL Y TINTA
(HISTORIA DE UNA IMPRENTA)

Francesc Badia y Cantenys, casado con Carolina Serrat y Montada, con quién tenia una hija, Carme, era operario del taller de industrias gráficas La Renaixença hasta el 1 de abril del año 1888, el día que inició en el nº 6 de la calle Montjuïc del Carme, un pequeño taller de imprenta con una minerva y algunas cajas. El año 1893 amplió el taller con moderación y por necesidad de espacio, lo trasladó a la calle del Carme núm. 15. Aquí no terminó todo y, poco a poco, pudo ir ampliando el negocio. El año 1894, obtiene, del Ayuntamiento de Barcelona, el permiso para instalar un motor de gas en un local de la calle Dr. Dou nº 14, donde la imprenta será trasladada algo más tarde y donde alquila el entresuelo de la misma finca, para instalarse con su familia, que pronto se verá ampliada con el nacimiento de su segunda hija, Carolina, el 1903.

Modestamente y con esfuerzo, la empresa sigue creciendo y en 1906, cuenta con una plantilla formada por 17 operarios, el más joven de ellos, Josep Folch Trilla, de sólo 15 años.

Con la muerte el año 1914 de Francesc Badia Cantenys, asumen la dirección de la empresa su viuda y su hija mayor, Carme, con la inestimable colaboración de Josep Folch. Desde este momento y hasta el 1919 la empresa queda registrada con el nombre de “Impremta Vídua de Badia Cantenys”. El 1919 se inicia con unos hechos muy dolorosos para la familia, el día 17 de enero muere Carme Badia, la hija mayor y delicada de salud. Muy afectada por la muerte de su hija, cinco días más tarde, el 22 de enero muere Carolina Serrat Montada. El mismo día de su defunción y en presencia del Notario, se nombra el Consejo de Familia para la hija pequeña, Carolina, que quedó ingresada en el Colegio Jesús y Maria del barrio de Sant Gervasi porque con 15 años era menor de edad. Dicho Consejo lo forman sus tíos Francesc Serrat Montada y Francesc Serrat y Elps; los doctores Fausto Berini, Felip Proubasta, Benito Oliver Rodes, el abogado Josep M. Milà y Camps, y Josep Folch y Trilla. El Consejo de Familia ha de asignar entre ellos los cargos de Tutor y Protutor, para los cuales son nombrados Josep M. Milà y Francesc Serra Muntada.

En esos momentos vuelve a hacerse un cambio de nombre en el registro mercantil y la imprenta pasa a llamarse “Impremta Badia de Carolina Badia Serrat” y quién queda desde entonces como gerente esJosep Folch, que va dando cuentas y detalles de la marcha del negocio al Consejo y a Carolina. Esta continuada relación entre ellos dos, les lleva al afecto y a la confianza, hasta llegar a su compromiso, que se efectuará el día de la Mercè del año 1924 en el santuario de la Mare de Déu de Montserrat. El 25 de julio de 1925 nace el primero de los tres hijos, Carlos; el 17 de mayo de 1927, el segundo, Jordi y el día 2 de junio de 1929, Xavier.

El año 1933 la imprenta se traslada a la calle del Pintor Fortuny nº 2 bis (posteriormente, con la apertura de la calle hasta la Rambla, se le da el número 16), una finca que se alquila con las mismas condiciones que la anterior de la calle del Dr. Dou, es decir, como taller en la planta baja y vivienda en el piso superior.

Con esfuerzo y sacrificio, se consigue llevar el negocio adelante, pero el país se ve inmerso en una conflictiva situación social, soportando momentos de huelgas y desórdenes públicos que lo llevan, el 18 de julio de 1936, al inicio de una guerra civil. Pocos días más tarde del inicio de la guerra, el Comité de Propaganda expropió la Imprenta y durante el tiempo de conflicto armado estuvo bajo el control de este Comité; no obstante, Josep Folch no perdió el contacto con el que era su negocio, ya que mediante un acuerdo con las autoridades del momento, consigue mantener su puesto de trabajo como gerente. Esto permitió que una vez finalizada la guerra, pudiese recuperar la titularidad.

Volvieron antiguos y nuevos clientes, confiando en el buen trato y diligencia en los trabajos.

Dentro del constante movimiento de operarios del taller, merece un especial recuerdo Antonio Espín “el ministro”, de quién decían que al oír las sirenas antiaéreas, se llevaba de la mano a los tres hermanos y corriendo como un rayo, iban hasta el refugio más cercano. Mantuvo su fidelidad y constancia hasta su jubilación dentro de la empresa.

Los hijos, Carlos, Jordi y Javier se iban incorporando a la empresa cuando la edad se lo permitía.

El año 1953 con esfuerzo, pero con facilidades por parte de los propietarios, se compra el local actual.

El 1958, Jordi y Xavier contraen matrimonio con Maria Castell y Montserrat Romaní. Del matrimonio Folch-Castell, nacen cinco hijos: Carles, Víctor, Francesc, Dolors y Marta, y del matrimonio Folch-Romaní, cuatro: Xavier, Montserrat, Albert y Jordi.

En 1970 se inician unos desventurados años: el 14 de mayo muere Montserrat Romaní, el 1973 Josep Folch Trilla, y el 1974, en un accidente fortuito, se produce la muerte de Carles Folch Badia en la playa de Begur.

En 1976 Xavier Folch Badia contrae matrimonio en segundas nupcias con Fe Montserrat Alonso. De este matrimonio nacen David y Marc.

La imprenta sigue con la titularidad de Carolina Badia Serrat, la cual por su avanzada edad traspasa el negocio a sus hijos Jordi y Xavier, que eran gerentes, y toman la titularidad como Imprenta Badia de Jordi y Xavier Folch Badia, Comunidad de Bienes. Es en esta época que se produce el paso a la impresión en tipografía, a la introducción del offset y posteriormente se introduce la informática, que cambiará totalmente los sistemas de preimpresión. Por la necesidad de espacio, se alquila un local en la calle Peu de la Creu nº 16, en el mismo barrio. Poco tiempo después llega la oportunidad de comprar este local.

El 1 de agosto de 1996 se produce la muerte a los 93 años de Carolina Badia Serrat.

La imprenta sigue actualmente con la administración y colaboración familiar de Xavier Folch Badia, Xavier Folch Romaní, Jordi Folch Romaní y Víctor Folch Castell, manteniendo el nombre tradicional e histórico de IMPREMTA BADIA.